La relación entre los perros y la música ha sido objeto de curiosidad y estudio durante mucho tiempo. ¿Alguna vez te has preguntado por qué tu perro comienza a aullar cuando suena una melodía particular?
O, ¿qué tipo de música prefieren nuestros compañeros caninos?
Uma no es de las que suele aullar, sin embargo, siempre lo hace cuando cantamos el «Cumpleaños feliz». No hay cumpleaños en el que Uma no cante.
Solemos mandar audios cantando el cumpleaños al cumpleañero o cumpleañera y, como no, Uma siempre nos roba el protagonismo.
Y, es curioso, porque cuando se oyen sirenas, los perros de los vecinos aúllan como locos y Uma, sin embargo, no hace caso.
Hoy trataremos el intrigante fenómeno del aullido de los perros en respuesta a la música, el efecto de diferentes tipos de música en los perros y cuál es la mejor música para calmar y contentar a nuestros peludos.
Los perros y la música
Los perros han sido nuestros fieles compañeros durante miles de años, entendiendo nuestras emociones, comportamientos y, en cierta medida, incluso nuestra lengua.
Sin embargo, su reacción a la música y los sonidos sigue siendo un campo lleno de misterios y descubrimientos fascinantes.
El aullido es una forma de comunicación primordial para los perros, y su interacción con la música abre un ventana hacia la comprensión de su mundo emocional y sensorial.
¿Por qué los perros aúllan con la música?
La teoría de la comunicación ancestral
El aullido es una conducta heredada de sus ancestros lobunos.
Los lobos aúllan para comunicarse con su manada, señalar su ubicación o reunirse después de la caza.
Cuando los perros aúllan en respuesta a la música, podrían estar respondiendo a un instinto primitivo de señalar su «presencia» o unirse a lo que perciben como los aullidos de otros perros, aunque en realidad sean sonidos musicales.
Frecuencias y tonos específicos
Algunas investigaciones sugieren que ciertas frecuencias y tonos en la música pueden ser similares a los tonos y patrones de aullido de los perros, provocando una respuesta instintiva de aullido.
Esto es particularmente notable con instrumentos de viento o canciones con notas altas sostenidas, que pueden imitar las frecuencias de los aullidos caninos.
El efecto de la música en los perros
La música no solo puede provocar aullidos, sino que también tiene un impacto significativo en el estado emocional y físico de los perros.
Estudios han demostrado que la música, especialmente aquella diseñada específicamente para la audición canina, puede tener efectos calmantes en perros en situaciones de estrés, como tormentas, fuegos artificiales o ausencia de sus adoptantes.
Música clásica vs. Heavy Metal
Un estudio realizado por investigadores mostró que los perros en un refugio de animales exhibían comportamientos más calmados y menos estrés cuando se les ponía música clásica, en comparación con aquellos expuestos a heavy metal, que mostraban más signos de ansiedad y agitación.
Esto sugiere que los perros son sensibles a los tipos de música y responden de manera diferente según el género musical.
¿Qué música es mejor para los perros?
Música suave y melodías tranquilas
La música que mejor parece funcionar para calmar y contentar a los perros es aquella con ritmos lentos, tonos suaves y melodías sencillas.
La música clásica, especialmente composiciones diseñadas teniendo en cuenta las sensibilidades auditivas caninas, puede reducir la ansiedad y el estrés, promoviendo un ambiente tranquilo para los perros.
Canciones diseñadas específicamente para perros
Existen composiciones musicales diseñadas específicamente para la audición canina, teniendo en cuenta su rango de audición y preferencias de frecuencia.
Estas composiciones suelen incluir ritmos lentos, tonos suaves y patrones rítmicos que replican el entorno acústico natural, lo cual puede ser particularmente efectivo para calmar a los perros.
Conclusión
El aullido de los perros en respuesta a la música y el efecto que esta tiene sobre ellos es un recordatorio fascinante de la complejidad emocional y sensorial de nuestros peludos.
Entender y respetar sus respuestas a diferentes tipos de música no solo nos permite cuidar mejor de ellos, sino que también nos acerca un poco más al misterioso mundo de cómo experimentan y se relacionan con su entorno.
Al elegir música que se adapte a sus preferencias y necesidades emocionales, podemos mejorar significativamente su bienestar y calidad de vida, fortaleciendo aún más el vínculo único que compartimos con nuestros amigos de cuatro patas.