Ropa para perros, ¿cuándo es necesaria?

Nosotras somos muy fans de la ropa para perros, básicamente, porque solemos ir a la nieve habitualmente en invierno e ir con Uma a la nieve es inviable si no lleva abrigo.

La necesidad de ropa para perros depende de varios factores, y en general, no todos los perros requieren usar ropa.

Esto es muy importante tenerlo en cuenta: no debemos poner ropa por capricho a nuestro perro, siempre debemos ponerla por necesidad, y siempre y cuando el perro esté cómodo.

Ojo también a la clase de ropa que escogemos… Nosotros miramos muchísimo la calidad de la ropa, así que normalmente la adquirimos en tiendas como Smartdog, así nos aseguramos que la ropa nos dure mucho más y cumpla con su función de abrigo.

Así que, si tienes dudas, sobre si tu perro necesita o no ropa, aquí te doy algunas pistas para aclararlas.

¿Cuándo es necesaria la ropa para perros?

La ropa para perros es muy beneficiosa en diferentes situaciones.

Por ejemplo, en climas fríos, algunas razas de perros, especialmente aquellas con pelaje corto, pueden necesitar abrigos para perros para mantenerse abrigados.

Es el caso de Uma que, aún teniendo bastante pelo, hay veces que las temperaturas en invierno bajan por debajo de los 0 grados, y no solo necesita abrigo, sino que cuando nieva, también son necesarias las botitas para proteger sus almohadillas.

En climas cálidos, sin embargo, algunas razas pueden beneficiarse de ropa que los proteja del sol excesivo. Por ejemplo, los crestados chinos o los perros sin pelo del Perú.

Razas pequeñas, como chihuahuas o los caniches toy, pueden ser más sensibles a las fluctuaciones de temperatura y pueden necesitar ropa para mantenerse cómodos.

Por otra parte, algunos perros tienen problemas de piel o alergias que pueden mejorar con el uso de ropa para proteger su piel de elementos irritantes.

Y eso sin contar, los postoperatorios. Después de cirugías o durante la recuperación de una lesión, la ropa para perros puede ser útil para evitar que el perro se lama o muerda la zona afectada.

En nuestro caso, hemos estado durante un mes utilizando un jersey fino para que Uma no se rascara con la pata la zona de puntos tras la extirpación de un tumor.

Si no hubiera sido por el jersey, los puntos hubieran volado hace tiempo.

Al final, lo principal es tener en cuenta las necesidades individuales de cada perro.

Algunos perros pueden no tolerar usar ropa, mientras que otros pueden beneficiarse de ella.

Siempre debes asegurarte de que la ropa sea del tamaño adecuado y cómoda para el perro, y observar su comportamiento para asegurarte de que se sienta bien con ella puesta.

¡Mi perro no quiere llevar ropa aunque lo necesite!

Algunos adoptantes se encuentran en la tesitura de ver que el perro pasa frío, por ejemplo, pero cuando se le pone alguna prenda es una fuente de estrés.

Para evitar estas situaciones, lo ideal es acostumbrar al perro desde cachorro, sobre todo si ya vives en zonas donde el frío es habitual.

Cuando un perro es cachorro y tiene pocos meses, es cuando hay que acostumbrarlo a situaciones que sabemos que de adulto serán cotidianas.

No solo me refiero a acostumbrarlo a llevar ropa, sino a ir en coche, llevarlo en un bolso para perros, entrenarlo en una jaula, etc.

Todo lo que interiorice de cachorro, de adulto será algo de lo más normal.

Pero, si tu perro ya es adulto y observas que al ponerle ropa se queda paralizado o muestra síntomas de estrés, te voy a dar una serie de consejos para que lo vayas acostumbrando de forma gradual y sin estrés.

Sigue los siguientes pasos y hazlo con paciencia y consistencia:

1. Introducción gradual: Deja que el perro huela y explore la prenda antes de intentar ponérsela.
2. Refuerzo positivo: Asocia la experiencia de usar ropa con algo positivo. Usa golosinas, elogios verbales y caricias cuando el perro tolera la ropa. Esto ayudará a crear una asociación positiva.
3. Sesiones cortas al principio: Inicia con sesiones cortas de tiempo con la ropa puesta. No obligues al perro a usarla durante largos períodos de tiempo al principio.
4. Usa ropa cómoda: Asegúrate de que la ropa sea del tamaño correcto y cómoda para el perro. Evita prendas que puedan apretar o causar molestias porque podría agobiarse.
5. Incrementa gradualmente el tiempo: A medida que el perro se acostumbra, puedes incrementar gradualmente el tiempo que pasa con la ropa puesta. Recompénsalo cuando tolere la ropa durante períodos más largos.
6. Distrae con actividades positivas: Durante las primeras veces que uses ropa, distráele con actividades positivas, como jugar o recibir golosinas, para que asocie la experiencia con algo agradable. El reto está en desenfocarle de la ropa y enfocarle en lo divertido hasta que se olvide completamente de que lleva algo puesto.
7. Sé consistente en el uso de ropa. Si solo pones ropa en el perro en ciertas situaciones, como cuando hace frío, podría asociar la ropa con algo negativo. Practica en diversas situaciones para que se acostumbre a diferentes escenarios.
8. Observa las señales de incomodidad: Si observas señales como rascarse, tratar de quitarse la ropa o comportamientos inusuales, quítale la ropa y vuelve a intentarlo más tarde.

Recuerda que no todos los perros se acostumbrarán cómodamente a la ropa, y algunos pueden simplemente no disfrutar de la experiencia.

Si el perro muestra una aversión constante a la ropa, es importante respetar sus límites y no forzar la situación.