¡Y porque no tiene más! Como bien nos había advertido la veterinaria, cuando el prolapso de la glándula lagrimal ocurría en un ojo, lo más probable es que también ocurriera en el otro. Y, ¡menos mal que ha ocurrido!
Digo menos mal porque ya teníamos fecha para la operación: el próximo 22 de abril. Si le llega a salir tras la operación, hubiera tenido que someterse a una segunda intervención y eso nunca es beneficioso, no porque la operación sea compleja, sino por la anestesia general, que siempre puede llevar a complicaciones, sobretodo siendo Uma tan pequeña… ¡no habrá cumplido ni los 5 meses!
Encima, yo quería esterilizarla a los 6 meses, así que habrá que hablar con la veterinaria para saber hasta qué punto es peligroso o no que dos operaciones se lleven a cabo tan a corto plazo.
La operación de las glándulas lagrimales, que se hará a la vez, tiene un porcentaje de éxito de un 80%. Hace unos años, los veterinarios optaban por eliminar la glándula y, afortunadamente, ya no lo hacen, ahora intentan reponerla en su sitio. Si, por alguna razón, no tuviera éxito la intervención, entonces sí que deberían extirparle las glándulas. Eso significaría que tendríamos que andar con suero fisiológico durante todo el día para evitar que los ojos se secaran por falta de lagrimeo.
Cuando le pregunté a la veterinaria por qué ocurrían estas cosas, enseguida me dijo que podía ser por tres razones: un defecto congénito (descartado porque sus padres no han tenido este problema), porque los padres compartieran sangre (en ese caso, sí porque el padre de Uma es hijo de la madre de Uma, vamos, que es padre y hermano a la vez) o porque sí, porque le ha tocado a ella. Pero, curiosamente, una hermana de Uma, también ha desarrollado el problema del prolapso lagrimal en un ojo, por lo que todo indica que es un problema derivado de ese parentesco de los padres.
Afortunadamente, dentro de todo lo que puede pasar en temas de defectos congénitos, este es el menor de los problemas porque a ella le permite llevar una vida normal (ya se ha acostumbrado al collar isabelino, e incluso a veces le damos descanso), no le duele ni molesta y lo más molesto es que, de cara a las personas, da la impresión de que está enferma y tienen cuidado en acercar a sus perros, por miedo a que sea una infección que pueda contagiarse, pero por lo demás, ella es feliz como una perdiz.
Aquí el cuadro de su carita.
7 comentarios
Que penita da verla así, pero bueno ya queda poco y a ver que tal va todo…
Como bien dices ya estaban advertidos d q esto podia suceder. Ahora confiemos en q todo salga bien en la operacion q de Seguro asi sera. Saludos y bendiciones para Uma desde Puerto Rico.
Muchas gracias Astrid!
Tranquila, seguro que con el cariño que le transmites se recuperará rápidamente.
Gracias Jaruizi!!
Con los ojos tan preciosos que tiene…pero seguro que todo va a ir fenomenal! La apoyaremos a distancia…
Mil gracias!! Queda menos de una semana para que la operen y estoy un poco nerviosa! Me da mucho miedo la anestesia con lo pequeña que es!!