El miedo a los petardos son uno de los miedos irracionales más comunes y peligrosos para nuestros perros.
El año pasado fue noticia la muerte de un Yorkshire por culpa de los fuegos artificiales que tuvieron lugar en Nochevieja.
El pobre animal murió debido a la ansiedad y a las heridas que se produjo al querer escapar por la puerta de la terraza de su casa.
Pero muchas veces no nos enteramos de la cantidad de cosas que pasan con los perros que sufren de fobia a los petardos: escapadas de casa, atropellos, pérdida del animal, etc.
Cómo reducir el miedo a los petardos del perro
Para evitar en la medida de lo posible que nuestro perro lo pase fatal durante estos días festivos en los que los petardos y los fuegos artificiales están a la orden del día, te voy a dar unos tips que te pueden ir de lujo para ayudar a tu perro a que lo pase algo mejor.
Con Uma hice ya un trabajo siendo ella cachorra de interiorizar los ruidos de truenos, petardos, fuegos artificiales, etc.
El mejor momento para hacerlo es entre los 2 y los 4 meses porque los perros pasan por un periodo de sensibilidad social a su entorno.
Es en este momento donde más sensible está a todo su entorno y lo que ello representa: personas, animales, ruidos, etc.
Debemos exponer a todos estos ruidos al perro de forma suave, no se os ocurra tirarle un petardo en la cara, pero sí podéis aprovechar sonidos que podéis conseguir en Internet para ponérselos a muy bajo volumen mientras juega o se divierte, para que asocie ese ruido con algo agradable.
Así lo hice con Uma durante este periodo y así puedes hacerlo a partir de ahora, tenga la edad que tenga tu perro.
Aunque costará algo más porque el miedo ya está interiorizado, sí podemos reducir esa ansiedad.
Para ello, hay que someter al perro a enfrentar su miedo y para ello lo vamos a desensibilizar, es decir, ayudar a que deje de ser sensible a este tipo de ruidos. ¿Cómo?
- Durante un momento de juegos en el que tu perro esté pasándoselo bien, a muy poco volumen pon una grabación de petardos y fuegos artificiales. Aquí te dejo un ejemplo con el que puedes trabajar. Recuerda ponerlo a muy poco volumen y deja que suene durante 20 minutos en el que irás subiendo muy poco a poco el volumen hasta que el perro diga hasta aquí. Es importante que durante la grabación, tu perro siga con su actividad de juegos. De lo que se trata es de que asocie que aunque haya petardos ahí afuera, dentro no pasa nada, es más, puede ser hasta divertido.
- Repite esto cada día durante un buen rato hasta que llegue un momento en que tu perro no reaccione de forma ansiosa. Ten mucho cuidado con el volumen, es algo que debe hacerse de forma gradual, no de un momento a otro porque la terapia podría ser peor.
¿Cómo debes actuar el día que haya petardos y fuegos artificiales reales?
- Mantén las ventanas bien cerradas y pon música en casa de forma que disimule el ruido exterior y los petardos queden en un segundo plano.
- Administra a tu perro un calmante o combina la acción de varios. Por ejemplo, el CBD para perros funciona perfectamente para reducir la ansiedad.
- Coloca en la habitación donde esté el perro un difusor de feromonas. Yo te recomiendo Adaptil. Las feromonas provocan en el perro una sensación de seguridad y calma, ya que eso es lo que integraron de la madre cuando eran cachorros.
- Intenta que la habitación donde esté sea la más tranquila de la casa, es decir, donde menos lleguen los ruidos de petardos.
Aunque es un proceso lento te aseguro que funciona.
¡Con Uma lo conseguí!
Ella no tiene miedo de truenos de tormenta ni de petardos ni fuegos artificiales que suenen relativamente cerca, porque de hecho siempre que ocurre intentamos hacer algo divertido y utilizar expresiones de alegría, de esta forma, para ella un día de tormenta o de petardos es un día festivo, en el que todo el mundo está contento.
4 comentarios
Da mucha tristeza lo que sufren los pobrecitos con este tema. Yo ni siquiera era consciente hasta que me contó la veterinaria de Kenzo la de tratamientos tranquilizantes que tenía que poner por estas fechas. No lo sabía porque él no nos ha dado problemas en este sentido: no sé si era un trabajo de sus anteriores dueños o el propio carácter de este perro, muy poco sensible a ruidos con fuegos artificiales, petardos, bandas de cornetas y tambores (lo he tenido en primera fila en traslados de procesiones, tan fresco), pero luego se puede llevar sustos tremendos con puertas de garaje que se cierran cerca de él de repente o frenazos de camiones o autobuses. Felices fiestas, chicas!!!
Muy felices fiestas Eva! Kenzo es un crac!!!
el tratamiento de uma fue efectivo para vos que lo hiciste de cachorra, ahora el mio tiene 5 años y empezó con este terror a ese tipo de ruido. cosa rara no se pone mal con los ruidos de disparos de un polígono de tiro que hay cerca.
Patricio, pero yo lo hice con mi anterior perro cuando éste tenía 8 años y funcionó bastante bien. Seguía teniendo miedo pero ya no se escondía ni se ponía nervioso. ¡No pierdas la esperanza!