Preparando a tu perro para el invierno: cuidados esenciales

Con la llegada del invierno, es importante no solo ajustar nuestra propia rutina, sino también prestar atención a las necesidades de nuestro perro.

Los perros, al igual que los humanos, pueden verse afectados por las bajas temperaturas y las condiciones invernales, por eso, voy a darte algunas pautas esenciales para asegurarte de que tu perro esté preparado y protegido durante la temporada de invierno.

Algunos consejos para preparar a tu perro para el invierno

¿Alguna vez has preparado a tu perro para le invierno? ¿O eres de los que siempre llega tarde? Nosotros desde que vivimos en Andorra nos gusta prepararnos para el invierno porque cuando menos te lo esperas, llegan las primeras nevadas.

El primer año nos pilló por sorpresa, pero ya no nos ha vuelto a pasar más, ¿por qué? Por que hemos seguido las siguientes pautas.

Mantén su pelaje en óptimas condiciones

El pelaje de tu perro actúa como una barrera natural contra el frío, por lo que es vital mantenerlo en buenas condiciones.

Cepilla a tu perro regularmente para eliminar el pelo muerto y distribuir los aceites naturales que ayudan a mantener su pelaje aislante.

Si tu perro tiene el pelaje largo, considera recortarlo ligeramente para evitar la acumulación de nieve o hielo en su pelo durante los paseos.

No se te ocurra pelar a tu perro más de la cuenta. Es importante que si le crece demasiado, te centres en las puntas y ya.

Ropa, ¿sí o no?

Pues depende de la raza de cada perro. No es lo mismo un Husky que no necesita nada de ropa porque su condición física ya viene preparada (capa de grasa en su cuerpo y diferentes capas de pelo que le sirven de abrigo) que un chihuahua, por ejemplo, un perro de climas tropicales que apenas tiene grasa en el cuerpo y su pelo lo forma una sola capa.

Por tanto, ropa sí, cuando sea necesaria. Uma, por ejemplo, necesita de abrigos impermeables cuando vamos a la nieve y botitas que solemos comprar en una tienda veterinaria online.

Proporciona un refugio adecuado

Si tu perro vive principalmente en exteriores, asegúrate de que tenga acceso a un refugio seguro y bien aislado.

La caseta debe ser lo suficientemente grande para que pueda darse la vuelta y acostarse cómodamente.

Llena el interior con mantas o almohadillas térmicas para que tu perro esté protegido del frío suelo.

Asegúrate de que el refugio esté alejado de corrientes de aire y elevado del suelo para evitar la humedad.

Raciona su comida y mantén la hidratación

Durante el invierno, los perros tienden a quemar más calorías para mantenerse calientes.

Ajusta su alimentación según sea necesario, pero evita la sobrealimentación, ya que el aumento excesivo de peso puede ser perjudicial para su salud.

Además, asegúrate de que tu perro siempre tenga acceso a agua fresca y no congelada.

Puedes optar por cuencos de agua con calefacción para evitar que el agua se congele.

Paseos y ejercicio

Aunque las temperaturas sean bajas, es esencial seguir proporcionando ejercicio a tu perro.

Los paseos regulares ayudan a mantenerlo activo y saludable. Sin embargo, acorta la duración de los paseos en climas extremadamente fríos y evita las horas más frías del día.

Protege sus patas del frío utilizando botines para perros o aplicando bálsamo protector en las almohadillas antes de salir.

Cuida de su higiene

El invierno trae consigo carreteras y aceras tratadas con sal y productos químicos para derretir el hielo, que pueden ser irritantes para las patas de tu perro.

Después de cada paseo, limpia sus patas con agua tibia para eliminar cualquier residuo y sécalas cuidadosamente.

Además, el baño frecuente puede resecar la piel, así que limita los baños a medida que sea necesario y utiliza un champú suave.

Vigila las señales de frío excesivo

Los perros también pueden sufrir de hipotermia y congelación.

Presta atención a señales como temblores, piel fría al tacto y letargo.

Si notas alguno de estos síntomas, lleva a tu perro a un lugar cálido de inmediato y cúbrelo con mantas secas. Si los síntomas persisten, busca atención veterinaria.

Al preparar a tu perro para el invierno, demuestras tu amor y preocupación por su bienestar.

Al seguir estas pautas esenciales, puedes ayudar a tu compañero peludo a disfrutar de la temporada de invierno de manera segura y cómoda.

Recuerda que cada perro es único, por lo que es importante ajustar estas recomendaciones según las necesidades individuales de tu mascota.