Perros de trabajo: pequeños grandes héroes

La mayoría de perros que conviven con nosotros son perros de compañía, sin embargo, hay un número importante de perros que dedican su vida a trabajar en beneficio nuestro.

Hoy me apetece rendir un pequeño homenaje a esos perros, pequeños grandes héroes dándoles un poco de visibilidad a través de este post. Y es que muchas veces no vemos la cantidad de funciones que un perro puede llevar a cabo. ¿Te imaginabas que había tantos trabajos para perros?

Perros de trabajo

• Perros pastor. Son los perros que ayudan a los pastores a reunir y controlar el rebaño, ya sea de ovejas, de vacas o de aves de corral. Lo conduce pero también lo protege de posibles ataques de otros animales. La raza de perro más característica para el pastoreo es el Border Collie. ¡Hasta hay concursos de perros de pastoreo para ver quién es capaz de llevar de un redil a otro al rebaño en el menor tiempo posible!
• Perros de caza. Desafortunadamente, estos perros son muy maltratados por sus humanos. Si bien pudiéramos pensar que los perros de caza tienen un trabajo muy agradecido que les permite libertad de correr por el monte, la motivación de llevar a su humano la presa, etc., éste no le agradece su trabajo de la mejor manera. Son muchos los perros de caza los que tras su jubilacion, acaban abandonados o muertos a manos de sus propios humanos. La realidad de estos perros es horrible y es de los trabajos menos valorados. Por suerte, siempre quedan unas minorías que tratan al perro como se merece, pero por desgracia como he dicho, son minorías. El trabajo de estos perros es el de matar, rastrear o detectar la pieza cazada y las razas de perros más características son los Pointers, Galgos o Setters.
• Perros guía o lazarillo. Por contra, los perros lazarillo o guía son los perros de trabajo mejor valorados. Entrenados desde cachorros durante 2 años tienen la función de ser los ojos de su humano. Son perros de asistencia para personas ciegas o con una grave deficiencia visual y su función es el de ayudar a su humano en sus desplazamientos. La raza más característica, sin duda, es el Labrador.
• Perros de terapia. Estos perros tienen un trabajo muy agradecido y que abarca muchos perfiles: cuidado de ancianos, niños con problemas emocionales o de discapacidad, drogodependientes, pacientes hospitalizados de larga estancia, etc. Cualquier raza de perro, incluso mestizos, pueden ser perros de terapia siempre que sean perros muy sociables y equilibrados. Como digo, es un trabajo muy agradecido para el perro ya que suele estar siempre acompañado y recibe mucho cariño.
• Perros de servicio. Estos perros trabajan generalmente en el ámbito de la salud y acompañan a personas con problemas de ataques epilépticos o diabéticos para avisarles de un ataque o subida de azúcar antes de que se produzca. También con aquellas personas con trastornos psiquiátricos que tienen que hacer frente a estados de ansiedad graves o de estrés post traumático así como, por ejemplo, acompañar a personas con autismo o esquizofrenia. Aquí también entrarían los perros guía, pero hemos preferido ponerlos en un punto específico.
• Perros de búsqueda y rescate. La labor de estos perros es crucial para salvar vidas. Desde encontrar personas bajo escombros a rescatar personas en el agua o seguir el rastro de personas desaparecidas. Estos perros están entrenados para seguir olores relacionados con las personas que hay que encontrar o rescatar. Pastores alemanes o Pastores Belgas suelen ser las razas más comunes.
• Perros detectores. Son los famosos perros policía, cuyo trabajo es el de encontrar estupefacientes, billetes, sangre, explosivos… Pero también evitar altercados. Los podemos ver muchas veces en partidos de fútbol o aeropuertos. La raza más conocida es el Pastor Alemán.
• Perros de trineo. Antes de las nuevas tecnologías eran el único transporte capaz de transitar por terrenos totalmente intransitables por el hombre sobre la nieve o las máquinas de aquella época. Hoy en día lo han convertido en deporte, sin embargo, aún hay personas que se trasladan de un sitio a otro en zonas de Alaska o el Polo Norte, y en pueblos aislados son los encargados de suministrar víveres y medicamentos. ¡Gran labor!
• Perros de carreras. Afortunadamente, cada vez son menos populares. El trabajo de los Galgos, que son los únicos perros que pueden trabajar en este tipo de carreras ya que son los perros más rápidos, es el de de correr tras un conejo (a veces artificial, a veces real). Evidentemente, el ganador consigue una buena suma de dinero para su humano. Desafortunadamente, como pasa con los perros de caza, cuando se jubilan pocos son los agradecidos que los mantienen a su lado.
• Perros truferos. El gran olfato de los perros les permite además de todo lo que he comentado, trabajar en la búsqueda de trufas. Un trabajo que permite a sus adoptantes ganar dinero con su venta. La raza más característica para este trabajo es el Lagotto Romagnolo, aunque casi cualquier perro puede ser adiestrado para encontrarlas.
• Perros militares. Son los perros de la guerra, un trabajo muy peligroso que le puede costar la vida: búsqueda de minas antipersonas o búsqueda de explosivos, pero también rastrean personas desparecidas y rescatan personas heridas. ¡Grandes héroes!
• Perros de guardia. Tienen también un trabajo muy poco agradecido ya que suelen ser perros confinados en casas, fincas, naves o almacenes con el objetivo de hacer de guardián, proteger el territorio y alertar de desconocidos. Suelen ser perros que no salen de ese perímetro y su vida, francamente, es muy triste y solitaria.

Seguramente me habré quedado sin nombrar más trabajos, como por poner otro ejemplo el de aquellos perros que trabajan en laboratorios para detectar ciertos tipos de cáncer, pero hoy sí quiero agradecer a todos estos perros todo lo que hacen por nosotros incondicionalmente. Y qué mal agradecidos somos… Hasta el perro que no tiene la función de «trabajar» nos ayudan sin querer con tan solo su compañía.

¡Gracias infinitas a todos ellos!