Las lesiones musculares en perros son un problema muy frecuente que todos queremos evitar.
Los perros, en especial los perros deportistas, pueden sufrir algún tipo de lesión muscular al correr.
Cuando detectes una lesión en tu perro, es muy importante que sepas qué producto veterinario utilizar, siempre aconsejado por profesionales, como el producto metacam perros.
Las lesiones más frecuentes en perros son las musculares.
Entre las más comunes se encuentra la contractura muscular.
Hay varias condiciones que pueden influir en que un perro tenga algún problema muscular, tanto en su frecuencia como en su gravedad.
Estas condiciones pueden ser la edad, lesiones anteriores, el temperamento del perro, la dieta, la intensidad y frecuencia del entrenamiento o deporte que practica, su actividad…
Un problema muscular en tu perro puede producirle dolor, discapacidad, perdida de rendimiento y tiempo de inactividad que puede alterar su vida diaria.
Así que es fundamental llevarlo a que le hagan un diagnóstico veterinario.
Cómo evitar los problemas musculares de tu perro
- Ejercicio frecuente: No hay que tener el perro encerrado en casa cada día. Es muy obvio, pero es muy importante que el perro haga ejercicio de manera frecuente. Si un perro está mucho tiempo sin hacer ejercicio y después le ponemos a ello, tendrá más posibilidades que acabe con un esguince o algo parecido.
- Calentar: Si el perro va a hacer algún deporte o va a tener que hacer mucho ejercicio, es fundamental el calentamiento previo para reducir las probabilidades de que sufra alguna lesión. El calentamiento aumenta el flujo de sangre a los músculos y los tendones, y, provoca que la temperatura corporal del perro aumente. Así que moverse activamente, trotar o caminar durante 10 minutos antes de hacer deporte, es suficiente para reducir la aparición de problemas musculares. Si el perro es de competición deportiva, es posible que también sea necesario hacer estiramientos.
- Enfriamiento: Después de haber hecho ejercicio, es recomendable hacer un periodo de enfriamiento para mejorar el metabolismo muscular y acortar el tiempo de recuperación del perro. Caminar durante 10 o 15 minutos basta para que cumpla con el proceso de enfriamiento.
- Dieta adaptada: La salud del perro es lo primero. Y, en gran parte, su salud depende de su dieta. Cada perro es diferente y hay que adaptar su dieta a su metabolismo. Además, en caso de tener un perro de deporte, este tendrá unas necesidades nutricionales específicas. Es importante proporcionar el alimento adecuado para su metabolismo energético y muscular. Con una dieta idónea se minimizará la posibilidad de que padezca algún esguince, distensión o contractura muscular.
- Entrenamiento adecuado: Es importante que el ejercicio que haga el perro esté adaptado a sus posibilidades. No hay que forzarlo a ir más allá de sus posibilidades y el entrenamiento debe ser progresivo.
Qué hacer en caso de que tu perro ya haya sufrido una lesión
Lo primero siempre será llevarlo al veterinario y hacer lo que él nos diga. Aun así, después de que esté curado, podemos hacer cosas para evitar nuevas lesiones:
- Estiramientos después del ejercicio.
- Dar reposo al perro.
- Darle un masaje. Se pueden usar aceites con efecto relajante o antinflamatorio. Pero cuidado, el masaje no puede hacerse en casos de infección, fractura, flebitis, patología vascular o dermatitis.