He tenido perros toda mi vida, y a ninguno le ha llamado tanto la atención la televisión como a Uma. Se queda embobada mirando las imágenes y los sonidos, incluso ha llegado a ladrar al escuchar depende qué ruidos. Ya puede ser una película de acción, un documental o la mujer del tiempo dando el parte meteorológico. A Uma le gusta ver todo. Y para prueba esta foto.
La vida de Uma
Hemos intentado alargar lo máximo posible el baño de Uma, dado que estamos en invierno, y aunque la bañamos dentro de casa, con agua calentita, con secador… pues el riesgo de que se resfríe es alto.
Hace unos 15 días, sí le dimos un baño en seco. El baño en seco consiste en pulverizar champú sobre su pelo y, a la vez que le secas, le vas pasando el cepillo para llevarse por delante la suciedad que pueda haber. No es lo mismo que un baño en condiciones, pero ya es más que nada. Además, utilizo el mejor champú en seco:
Como un cachorro lleno de energía, Uma se despierta a las seis y media cada día, pero afortunadamente, se queda en su cama jugando con un hueso durante una media horita. A las siete ya se asoma a nuestra cama para llamarnos la atención y, claro, con esas fiestas que te hace cualquiera le pega bronca. Así que, en este sentido, hemos tenido que adaptarnos al nuevo horario.
Si es que es para comérsela de lo lista que es aprendiendo tan rápido trucos de obediencia básica: teníamos claro que queríamos enseñarselos cuanto antes.
Lo que no hubiéramos imaginado nunca es que aprendiera tan rápido con lo pequeña que es.
Trucos de obediencia básica
Ya ha aprendido a acudir a la llamada con la orden «ven».
También ha aprendido los trucos de obediencia básica «sienta», «pata» y «tumba».
Aprende muy rápido. Necesitó solo de 5 minutos para aprender a sentarse, unos 10 minutos para dar la pata y unos 15 minutos para aprender a tumbarse.
Eso sí, en diferentes días, y cada día reforzando estos trucos para que no se le olviden y, además, es muy graciosa, porque cuando ve algo de comida y le dices «siéntate» le falta tiempo para hacerlo todo a la vez: se sienta mientras te da la pata, se tumba, se vuelve a sentar…
Poco a poco, es pequeña y tiene mucho nervio.
La orden «ven aquí» también la conoce a la perfección, solo que cuando le interesa viene y cuando no le interesa no viene, pero tenemos una palabra clave que no falla nunca y que funciona mejor que la palabra «ven» y es la palabra «comida».
Ella oye «comida» y las patas de atrás le van por delante de las de delante…
Y como ejemplo, este vídeo que hemos grabado hace un ratito de todo lo que ha aprendido:
Los siguientes trucos de obediencia que queremos enseñarle es girar sobre sí misma y dar la vuelta.
Todo esto no es porque es muy gracioso verla haciendo tantas cosas con tan poco tiempo, que también, sino sobretodo, porque es muy beneficioso para ella y para cualquier perro estimular su mente aprendiendo cosas.
Y Uma será toda una erudita.
El jueves fuimos al veterinario de nuevo, a por la segunda vacuna de Uma. Más fuerte que la anterior pues previene de varias enfermedades como el parvo, el moquillo, la leptospirosis, la hepatitis y la tos de las perreras. Un coctel importante que tampoco hizo que presentara síntomas, más que esta vez sí, tenía más sueño.
Segunda vacuna

Como la anterior vez, volvió a explorarle entera: oídos, ojos, boca, panza, le tomó la temperatura, y seguimos hablando de las dichosas lombrices que parecía que se habían reactivado.
¿Acabará esta pesadilla ya de una vez?
Y me dijo que sí, de hecho le dio ahí mismo una pastilla bastante fuerte que me aseguró que acabaría con el resto que quedaran ya en su interior.
Uma volvió a no enterarse del pinchazo gracias a una golosina apetitosa, y lo que sí que no le gusta nada es que le tomen la temperatura (recordemos que a los perros se les toma la temperatura por el ano… muy incómodo la verdad, sobretodo en cachorros que lo tienen todo tan pequeño).
En esta revisión ya me dio su cartilla o pasaporte, donde vienen mis datos, información de Uma y las vacunas que lleva puestas.
¿La buena noticia? Que pasados dos días… ¡ya no vi lombrices en las cacas!
La próxima vacuna: en 3 semanas.
La mayoría de propietarios ignora realmente lo que le da de comer a su perro. La comida casera es perjudicial para su salud (alimentos que no pueden metabolizar y que a corto plazo afectan a problemas de piel, cacas, vómitos, diarreas…) pero sobretodo a largo plazo (problemas renales, menor esperanza de vida, cáncer, etc.),
Sin embargo, la comida comercial es para estudiar, y es que la gran mayoría de marcas de alimento seco están compuestas por subproductos animales. Esto significa que te venden muy bonitos los ingredientes, pero en realidad, el alimento seco está compuesto por carcasas, piel, cartílagos, pezuñas, … Vamos, lo que sobra en todos los mataderos que preparan carne para consumo humano, pues va a los pobres perros. Imagínate los nutrientes que llevan… nada y menos, de ahí que tengan que hinchar las croquetas con vitaminas artificiales.
Así que como yo no quiero alimentar a Uma con casquería ni productos artificiales, he mirado muy mucho lo que darle de comer, y he apostado por dos marcas: una de alimento seco para que ejercite las mandíbulas y limpie los dientes, y una de alimento deshidratado, es decir, comida deshidratada que luego preparas en casa. La ventaja de la comida deshidratada es que todos los ingredientes conservan los nutrientes y, lo más importante, son ingredientes naturales que no necesitan de conservantes, colorantes ni aromas artificiales, porque huele que alimenta, y si no, que se lo digan a Uma.
He apostado, como decía, por alimento deshidratado, en este caso, la marca de confianza es Naku. De entre todas las variedades, evidentemente, he escogido la de cachorros, que lleva arroz, pollo y una variedad de verduras.
La preparación es muy fácil. Al venir deshidratada, exige una elaboración muy sencilla.
Primero, vertemos la cantidad adecuada en el cuenco. Como puedes ver, todo está triturado y deshidratado.
A continuación, se calienta la misma cantidad de agua para que se realice la mezcla y se vierte en el cuenco, moviendo con una cuchara para que se mezcle todo bien y se deja reposar 10 minutos. Así da tiempo a que los ingredientes se hidraten y a que Uma no se queme cuando coma.
Y este es el resultado cuando han pasado 10 minutos: el arroz se ha hinchado, los trocitos de pollo aparecen finamente picados y aparecen trazas de colores que corresponden a las verduras.
A Uma le encanta, y si no, a ver quién la despega del cuenco.
Como he dicho, hay una segunda marca que utilizo para que utilice los dientes, ya que con la comida deshidratada no los usa, simplemente engulle. La marca a la que me refiero es Acana u Orijen, dos marcas de alimento seco, ambas de Canadá, y que han ganado muchos premios por la calidad que ofrecen. Al igual que Naku elaboran la comida en una fábrica de consumo humano, así que imagínate las medidas higiénicas y sanitarias que se toman. No usan conservantes, colorantes ni aditivos, todo bien fresco, destacando el salmón entre todos los ingredientes y las frutas y verduras.
Como son marcas complicadas de comprar, yo lo compro todo online y me lo traen a casa. En este caso, Naku lo puedes comprar en su tienda online llamada Zaunk, y las marcas Acana y Orijen las puedes conseguir en la tienda online Zooplus.
¡No podemos estar más contentas! Y es que la marca Podenko, la tienda de productos ecológicos y artesanales, le ha hecho un regalazo a Uma: un juguete mordedor y una correa doble para que pasee con su primo Woody.
Podenko: accesorios y complementos para perros
Podenko es una tienda de accesorios caninos de primerísima calidad, ya que todos los productos están fabricados artesanalmente y con productos ecológicos.
La correa es la envidia de todo paseador de perros, en serio, todos los que la han visto me han preguntado por ella, encima lleva a juego una bolsita para que metas las golosinas o las bolsitas para recoger las cacas. ¡Qué acierto!
Porque al tener la posibilidad de desmontarla, puedes crear una sola correa uniendo todas las partes, o puedes dividir las partes en dos para que puedes pasear a más de un perro.
La idea es muy cómoda y está muy bien pensada para alguien que tiene un perro y quiere una correa larga, pero que eventualmente pasea con otro perro, y no tiene porque andar con dos correas con el lío que se llega a formar.
Al ser dos correas en una, la posibilidad que se enreden y se líen es imposible. Lo hemos comprobado y damos fe del cambio que ha supuesto esta correa al pasear con Uma y Woody.
¡Menuda comodidad y tranquilidad!
Por, otro lado, el juguete mordedor ha sido todo un éxito: Uma, en un primer contacto, no lo soltó en más de 20 minutos y ahora se lo lleva a la cama, ¡siempre!
Y no se lo quites, que se despierta y se lo lleva de nuevo a su vera.
Ya os digo, ¡enamoradas estamos!
Se nota la calidad del producto en sus textiles antimordeduras, los acabados, los remaches y el mimo que le han puesto en cada una de sus creaciones, que al ser totalmente ecológicas, evitarán que cualquier perro pueda desarrollar algún tipo de alergia.
¡Gracias Podenko! ¡No podemos estar más contentas!
Los juguetes cuando se tiene un cachorro son indispensables porque se pasan el día mordiendo y hay que enseñarle con paciencia a que solo pueden morder los juguetes, y nada más.
Estos son los juguetes de Uma.
Uma aprende a bajar las escaleras: vivimos en una casa de dos plantas, y uno de los peligros que más nos preocupaba era la escalera y que Uma pudiera caer dando tumbos durante 16 escalones… Pero, ayer nos sorprendió siendo toda una valiente: bajó sola los 16 escalones aunque, a mitad de camino entrara en pánico.
Le costó 10 minutos decidirse pero el final: lo logró.
¡Una crack!
Una de las actividades favoritas de Uma es dormir, y es que necesita recargar las pilas tras intensas sesiones de no parar un segundo quieta: que si muerdo esto, juego con lo otro, corro de aquí para allá, me peleo con la cama, destrozo la caja… ¡Acabamos agotados todos! Pero a la hora de recuperar la energía y dormir, se la ve feliz, tan feliz que hasta ronca.
Uma tiene exactamente 57 días y está muy espabilada. No solo tiene nervio y carácter sino que ha empezado a emitir sus primeros ladridos. Ya sabe reclamar lo que quiere y es una perrita valiente: ¡no le tiene miedo a ningún ruido! Ya sea el secador de pelo, la lavadora, la secadora, un coche… Uma está pendiente de todo con mucha curiosidad y afronta todo lo nuevo sin temor.
Aunque la veterinaria nos advirtió que evitáramos sacar a Uma a la calle y mucho menos relacionarla con otros perros y así no arriesgar con enfermedades y contagios, sabemos la importancia que tiene el periodo de socialización en los cachorros, una etapa fundamental en cualquier cachorro de entre 1 y 4 meses.
Aunque Uma cumple los 2 meses el domingo que viene, no queremos privarla de relaciones que pueda establecer tanto con personas de toda clase como perros, eso sí, no callejeros, sino cuidados por sus propietarios.
Por eso, esta mañana nos hemos encontrado con un montón de perros en la plaza del pueblo, todos acompañados por sus propietarios.
Al principio pensamos que se trataba de alguna jornada de adopción, sin embargo, caímos en la cuenta que ayer fue San Antonio, patrón de los animales, cuando vimos el cura acercarse…
Así que aprovechamos y además de bendecirla, «bautizamos» a Uma.



Y tras la bendición, no paraba de moverse en brazos porque quería relacionarse con otros perros, así que la dejamos disfrutar de los juegos con otros peludos:


Y con tanto movimiento y, sobre todo, emociones, cuando ha llegado a casa ha dormido 3 horas seguidas.

Enamorados nos hayamos…
La primera visita al veterinario fue al día siguiente de tener a Uma en casa. Teníamos información suficiente como para saber que comía muy bien, las heces estaban duras… y con lombrices. Tras el tratamiento que nos dio, hubo una pequeña mejoría, pero ya nos advirtió la veterinaria que es un proceso lento. Veríamos cómo las lombrices salían muertas, pero eso no significaba que ya se había acabado el problema, sino que habría que esperar a que los huevos que hubieran puesto las lombrices eclosionaran para volver a darle el tratamiento y volver a empezar de nuevo.
Cuando compré la cama para Uma, jamás pensé que le iba a dar un uso diferente. Y es que a Uma le encanta el postureo.
En teoría, la cama cueva que adquirí era para que ella se sintiera protegida y segura dentro de la misma.
Cuando un perro es mestizo como Uma, se pueden llegar a imaginar cientos de aspectos diferentes sobre los padres del perro. Afortunadamente, he podido conocer tanto a la madre, como al padre de Uma, ¡y también a sus hermanas de camada! Si Uma hubiera sido una más de los miles de cachorros que alguien encuentra de repente en cualquier esquina, hubiéramos pensado, por su aspecto, que quizás era mezcla de Cocker con Chihuahua, o de Cavalier King con Caniche… o incluso alguna mezcla de Yorki.
Uma está adaptándose a su nuevo hogar de forma muy rápida. Es una cachorra valiente, que apenas se inmuta por los diferentes sonidos nuevos que va escuchando: la secadora, la lavadora, música, golpes fuertes, palmadas, etc. Además, en su segundo día ya sabe que debe hacer sus necesidades en el periódico, por lo que sus avances no pueden ser mejores. Eso sí, su actividad preferida sigue en auge:
Las primeras horas de un cachorro en su nuevo hogar son unas horas muy estresantes y de añoranza para el pequeño que se enfrenta a la ausencia de su madre y hermanos y a un entorno totalmente desconocido.
Por eso, ya debemos tener en cuenta que el cachorro llorará por muchas razones: miedos, inseguridades, añoranza, desconocimiento, nuevos olores, nuevos sonidos…
Uma llegó a casa con 44 días de edad.
Fuimos a recogerla a las 18 horas de la tarde de un día de Reyes y estaba totalmente dormida, por lo que el trayecto en coche también lo hizo totalmente dormida.
En cuanto llegó a casa y se ubicó empezó a manifestar sus primeros miedos y añoranzas.
Las primeras 12 horas estuvo llorando a cada ratito porque echaba de menos su entorno y su familia. Ahora tendrá que acostumbrarse a nuevos olores, nuevas personas, nuevos sonidos…
Estas son sus primeras imágenes y es que… ¡no podía parar de mirarla ni de hacerle fotos!



Las primeras horas de un cachorro en su nuevo hogar
Es indispensable que las primeras 24 horas sean las primeras horas de adaptación, por lo que jamás se debe dejar totalmente solo al cachorro.
Siempre debe estar acompañado por alguien de la familia, para que pueda consolarle y pueda darle calor y caricias cuando eche tanto de menos a su madre y hermanos.
Los lloros te romperán el corazón, pero con caricias y juegos, poco a poco se irá adaptando y forjando un nuevo vínculo con vosotros, su nueva familia.
Las noches serán las peores, que es cuando la oscuridad y el silencio no ayuden a que el perro se enfoque en otras cosas.
Es cuando más se acordará de su madre y hermanos y será cuando más va a llorar.
Dependerá de ti y de la atención que le procures para que la experiencia del cachorro sea más o menos traumática.
Te dejo una infografía que te ayudará a adaptar a tu cachorro a tu hogar.
Mañana llega Uma a casa. Hace 8 meses perdí a Nit, mi mestizo de 15 años al que tuvimos que sacrificar porque tenía cáncer con metástasis. Hasta hace pocas semanas ni me imaginaba que iba a adoptar otro perro en tan poco tiempo, puesto que el duelo de mi viejo aún estaba presente, sin embargo, cuando vi que regalaban a Uma no me lo pensé: hembra, mestiza, de raza pequeña… era perfecta. No me iba a devolver a Nit, sin embargo, traería ilusión a casa.