¡Hola a todos y a todas! Me he apuntado a un concurso que consiste en participar como modelo perruna en un calendario perruno, y para ello necesito acumular Likes o Me Gustas. ¿Me ayudas?
La vida de Uma
Al más mínimo rastro de olor, ahí está el perro, ¿verdad? Y no hay nada más molesto que estar comiendo y que tu perro esté constantemente demandado un poco de comida. Quizás haya propietarios que disfruten con esto, sin embargo, hay que pensar en el día que haya invitados en casa. ¿Cómo vamos a controlar que el perro no pida?
Enseñar a un perro a no pedir en la mesa
Porque a nosotros no nos gusta que esté pidiendo y menos que moleste a personas cuando están sentados en nuestra mesa, tuvimos claro desde el principio que debíamos controlar esta conducta, ¡aún no teniendo a toda nuestra familia a favor! Porque si bien la educamos en casa a no pedir, cuando íbamos de invitados a casa de otros familiares, éstos sí que la malcriaban, pero bien… ¡el mundo contra nosotros! Sin embargo, debo decir que en casa a nosotros nos respeta siempre y cuando hay invitados, se porta de lujo. ¡Si es que es una monada!
¿Cómo hemos educado a Uma a no pedir en la mesa?
- Jamás le hemos permitido pedir. Las primeras veces que hacía el ademán de «a ver si cae algo» siempre se encontraba con un NO y con un ¡a dormir a tu cojín! Al principio costaba que hiciera caso, pero con acompañarla al cojín y darle un hueso de cuero como premio bastó para empezara a asociar que si pedía en la mesa no se llevaba nada, mientras que si se iba al cojín caía un premio. Con el tiempo, no solo ya nunca nos pide, sino que mientras nosotros nos sentamos en la mesa, ella se acuesta en su cojín sin esperar nada a cambio. ¡Un amor!
- Cuando hay invitados, Uma se excita mucho. Todo el mundo le hace caso, le acaricia y siente que es la protagonista de la historia. Y cuando nos sentamos en la mesa, a veces prueba de asomarse, no para pedir comida, sino para buscar caricias o para acercar su pelota invitando a jugar. Dos llamadas de atención son suficientes para que entienda que no es el momento.
- Un perro con hambre puede ser muy pesado. Por eso, no descuidar la alimentación es fundamental. A Uma la alimento dos veces al día, a primera hora de la mañana y a media tarde, de forma que cualquier buen olor no le desespera. Además, la alimento con comida de calidad. Esto es importante y no es ninguna tontería. Si está bien nutrida no le hará falta demandar más comida porque su cuerpo no lo pedirá. Sin embargo, si le damos comida de mala calidad, su cuerpo le pedirá más comida para cubrir las necesidades nutritivas de las que carece.
Los veterinarios recomiendan que a partir del año se alimente al perro una vez al día, sin embargo, yo prefiero continuar esta rutina de dar dos tomas diarias, por dos principales razones: la primera, evitar que tenga hambre y se acostumbre a pedir en la mesa, y la segunda, para evitar la torsión estomacal.
Es importante que a la hora de educar al perro a que no pida en la mesa haya consenso familiar. O todos vamos a una, o confundiremos al perro y no habrá forma humana de educarle.
¿Y vosotros cómo lo lleváis con vuestros perros? ¿os piden mientras coméis?
Últimamente, aprovechamos los fines de semana para ir de excursión y practicar senderismo con Uma, por eso queremos enseñaros y compartir las excursiones con perro que hemos hecho.
Con 11 meses que tiene ya, no habíamos tenido oportunidad hasta hace bien poco.
Entre que la adoptamos en enero y era demasiado pequeña, luego los problemas de las operaciones de los ojos y la esterilización y luego el calorón del verano, desconocía la pobre lo que era una buena excursión.
Como nosotros somos bastante aficionados al senderismo, nos moríamos de ganas de que Uma nos acompañara.
Excursiones con perro
Realizar excursiones con perro es una gozada.
Hemos empezado muy light para que vaya acostumbrándose a las largas distancias, haciendo una media de 5 kilómetros. Estas han sido las tres primeras salidas:
Ruta por acantilados – Pou des Lleó
Ruta por playas – Santa Eulalia
Ruta por costa – Punta Arabí
¡Se lo pasa bomba! Pero para ir de excursión, también tenemos que ir preparad@s con una pequeña mochila.
Mochila para perros para las excursiones
Para realizar excursiones con perro no basta con llevar tu mochila, sino también la de tu perro:
Bolsas para la caca
En ninguna excursión le ha dado por hacer sus necesidades pero las bolsas son imprescindibles.
¡No me extraña que prohíban la entrada a los perros a la playa! ¡Hay mucho propietario guarro!
Luego lo pagamos los que sí recogemos todos los desperdicios pero sentí vergüenza ajena de ver tantas cacas de perro en la playa. ¡Vergonzoso!
La correa
Está muy bien que vaya a su aire, pero por las zonas de playa donde hay gente el perro debe ir atado, y en nuestro caso que pasábamos por bastantes acantilados, también.
Y es que Uma no le tiene miedo a las alturas, asomándose muchas veces más de la cuenta, por lo que decidí en ciertas zonas asegurarla.
También es importante en el caso de perros no muy sociables, atarlo donde haya perros.
No es el caso de Uma, que se lleva genial con todos, pero en una de las excursiones se topó con una perra muy malhumorada que se le tiró encima. ¡Pobre Uma!
Empezó a chillar y a correr asustada sin dirección, ¡menos mal que salió el dueño a reprenderla! Al final fue solo un susto y no le hizo daño, pero la cola baja le duró un buen rato.
Dispensador de agua
Hay de muchos tipos, yo llevo un botellín que se rellena de agua y que está unido a un recipiente, de forma que cuando presionas el botellín sale el agua en el recipiente y Uma puede beber cómodamente.
El agua es fundamental para que el perro esté hidratado.
Snacks para perros
Parece una tontería, pero los snacks funcionan a la perfección cuando quieras que el perro te haga caso.
Hay veces en los que el perro, por muy educado que esté, se resiste a obedecer porque está demasiado excitado con otra cosa.
Por ejemplo, a Uma le pierden los niños. Nos hace caso a todo, pero en cuanto ve a niños jugar, se vuelve sorda.
Por eso, cuando escucha la palabra «chuche» desenfoca la atención y viene corriendo. Las golosinas o premios son un método muy socorrido para estas situaciones.
Un pequeño botiquín
Depende por las zonas en las que te muevas, es importante llevar un pequeño botiquín para el perro.
En nuestro caso, nos llevamos unas toallitas y el suero fisiológico para los ojos, porque Uma en cuanto toca la arena, el agua o las algas se restriega que da gusto.
Hemos llegado a quitarle trocitos de alga de dentro del ojo, ¡y lo que cuesta! Por eso, las ampollitas de suero vienen siempre con nosotros cuando vamos a la playa.
Un identificador
Uma lleva ya su Cody Pet, pero es fundamental que el perro esté identificado con su plaquita, porque nunca se sabe qué puede pasar.
Cuando Uma fue atacada por esa perra malhumorado empezó a correr sin fin, pobrecita, y se paró a lo lejos a esperar que fuéramos en su búsqueda, pero perfectamente podría haberse perdido.
Pasa muchas veces que el perro huele a una perra en celo y si te he visto, no me acuerdo.
Por eso, una plaquita con el teléfono es lo ideal para localizar al perro lo antes posible.
El teléfono de urgencias veterinarias
Es importante que llevemos encima el teléfono de urgencia por si el perro sufriera algún accidente.
Nunca se sabe lo que puede pasar, por eso, tener el teléfono a mano es muy tranquilizador.
Una llamada a tiempo para una consulta rápida, y ganamos en salud.
Algún juguete
Esto es opcional. Muchas veces no hace falta pero, por ejemplo, en el caso de ir a la playa es divertido jugar a la pelota, al frisbee, o a cualquier otro juguete con el que el perro pueda divertirse.
Conclusión
Las excursiones con perro son todo un acierto por todo lo que supone: ejercicio físico, diversión, aire puro,…
¿Y tú? ¿Vas de excursión con tu peludo?
¡Por fin se acabó el caluroso verano! Y para celebrarlo hemos ido de excursión a la playa con Uma.
Empieza a hacer una temperatura perfecta para salir de excursión y es que en verano entre el calor y que las playas están atiborradas de gente y prohibidas para los perros no se puede disfrutar lo que se quisiera, por eso, ahora no desaprovechamos ningún fin de semana bueno.
Este pasado domingo decidimos hacer un poco de senderismo con Uma.
No hicimos una distancia muy larga porque no está acostumbrada a largas distancias: 5,5 Km., bordeando la costa y disfrutando de playas y acantilados.
Pasamos ni más ni menos que por cuatro playas.
Debo confesar que en los tramos de acantilado tenía que atarla porque no conoce el vértigo y el miedo a que se resbale me tenía un poco emparanoiada, pero el tramo de la playa para ella era un disfrute continuo.
Atención al brote de locura en la playa:
Explorar y conocer nuevos rincones le encantaba.
Así quedó después del revolcón en el mar, la arena y las algas. El revolcón que le di luego en la bañera de casa para quitarle toda la arena y las algas ya no le gustó tanto 😛
Pero valió la pena: una mañana de diversión, descubrimientos y ejercicio físico y por la tarde… una siesta de 4 horas.
¿Y tú? ¿Qué planes haces con tu perro? Nosotros intentaremos, si la climatología lo permite, hacer una excursión cada fin de semana con Uma para que pueda descubrir sitios nuevos y revolcarse en la playa siempre que quiera.
Con la llegada del otoño, llegan las tormentas más potentes.
El calor del verano choca con los primeros fríos del otoño y esto provoca que las tormentas sean especialmente abundantes, cargaditas de rayos y truenos y de agua.
Por eso, antes de que llegaran las primeras tormentas ya eduqué a Uma para que no supiera qué era el miedo a las tormentas.
Lo ideal es hacerlo cuando el perro es bien cachorro, sobre todo, durante la etapa de socialización que es cuando más sensibles están a los estímulos que le rodean.
Educar a un perro a no tener miedo a las tormentas
En cuanto Uma cumplió los 2 meses y hasta los 4 meses, fui exponiéndola a ruidos de truenos a muy bajo volumen mientras jugábamos.
Cada día repetía esto, empezando a muy bajo volumen, apenas imperceptible, y día a día, iba subiendo muy poquito el volumen e incluso mezclaba truenos con música para que no se enfocara solo con el ruido del trueno.
¿El resultado? Llegó un día que no hacía caso a ningún trueno y a día de hoy hace caso omiso a los truenos de las numerosas tormentas que han tenido lugar de un mes para este tiempo.
Estás más que acostumbrada, y como ha asociado el trueno con juegos, cuando empieza a tronar me trae un juguete. Increíble, ¿verdad?
No te preocupes si tienes un perro que tiene auténtico pavor a las tormentas porque se puede reeducar.
Te enlazo aquí un par de recursos que yo misma utilicé con Uma y que podrán ayudar a que tu perro pierda miedo a los truenos.
Si se empieza cuando el cachorro tiene entre 2 y 4 meses, eso que ganas, porque es más fácil enseñar algo desde cero, que reeducar, pero nada es imposible.
De todas formas, siempre es aconsejable que el día de las tormentas le des un poco de CBD para perros, puesto que lo relajará y calmará su ansiedad de forma muy beneficiosa.
El miedo a las tormentas se puede superar
Es muy importante que empieces a muy bajo volumen para evitar que traumatices al perro, sobre todo, si ya tiene el miedo a los truenos instalados en el cuerpo.
Ten paciencia, no corras, pon la música con truenos diariamente desde muy bajo volumen aumentando gradualmente el volumen a medida que pasen los días y mientras suena la música haz que tu perro se divierta.
Ahora mismo, he aprovechado que he puesto la música con truenos para ponérsela a Uma. Estaba durmiendo, así que le he interrumpido la siesta:
De todas formas, tienes muy buenos consejos para el miedo a las tormentas en la web de Encantador de Perros.
¡Felices tormentas!
Menudo regalazo le ha hecho Cody Pet a Uma, me atrevo a decir que ya es un imprescindible tras conocer todas sus ventajas. Es más, tengo varios identificadores para sortear, pero eso lo explicaré más adelante.
Acostumbrar a un perro a quedarse solo en casa es más fácil de lo que crees.
Una de las cosas que más temíamos era dejar a Uma sola en casa, y más cuando mi pareja y yo trabajamos en ella, por tanto, Uma está acostumbrada a estar prácticamente 24 horas con nosotros.
Si bien al principio le costó un poco quedarse sola, poco a poco va tomándoselo mejor.
El máximo de horas que ha estado sola han sido de 6 horas y ha habido un poco de todo.
Cuando fue muy cachorra y tenía los problemas de morder absolutamente todo debido a las molestias de la dentición, decidimos no dejarla nunca sola, así que contamos con la ayuda de amigos y familiares que hicieron de niñeros durante unas horas.
Sin embargo, a partir de los 7 meses y cuando la conducta de morder ya la había perdido, empezamos a dejarla durante varios periodos sola.
La primera vez la dejamos 2 horas, la segunda 5 horas y el resto de veces ha oscilado entre 2 y 6 horas.
Para evitar que estuviera ladrando sin parar, orinarse dentro de casa o destrozando cosas, hemos seguido unos pasos de forma muy estricta.
Pasos para acostumbrar a un perro a quedarse solo en casa
- Antes de salir de casa, la hemos llevado a dar un buen paseo con juegos de buscar la pelota hasta dejarla casi sin aliento. La idea era dejarla lo más relajada posible y que hiciera sus necesidades.
- Antes de irnos, despejamos muy bien la habitación donde la dejamos: sofá sin cojines, ningún objeto a su alcance, zapatillas recogidas y eso sí: su caja de juguetes.
- En YouTube hay multitud de vídeos que duran muchísimas horas en las que hay música relajante para perros. A un volumen muy bajo, le dejo puesta la música para que le acompañe. El silencio nunca es buen compañero.
- El momento crítico es cuando cerramos la puerta: los perros son muy inteligentes y saben perfectamente cuándo nos vamos. Por eso, rompo ese enfoque con algo que le gusta mucho, por ejemplo, una golosina. Yo siempre le dejo un stick mordedor que le puede llevar unos minutos comérselo, así que nos da tiempo de irnos y dejarla en casa la mar de a gusto.
- Deja que tu perro tenga acceso a una ventana: le dará la vida.
La mayoría de veces hemos llegado a casa y se ha portado genial.
Nunca nos hemos encontrado con pipís o cacas, he preguntado a los vecinos y nadie me ha comentado que le haya escuchado ladrar y no ha causado apenas destrozos.
Tan solo una vez, mi pareja se dejó un libro encima del sofá y se lo encontró así:
Pero, muy bien, ¿eh? Solo se comió la contraportada. 🙂
Por tanto, no nos quejamos en absoluto, porque Uma se está acostumbrando muy bien a quedarse sola y a portarse de lujo.
El episodio del libro pasó la segunda o tercera vez que se quedó sola, y la culpa fue nuestra.
Así que, si tienes un perro que sufre mucho al soledad, intenta aplicar estos pasos. ¡A nosotros nos funciona!
¿No sabías que se puede enseñar a ladrar lo justo a un perro?
El tema de los ladridos es uno de los problemas que más preocupan a los adoptantes de perros, sobre todo, si viven rodeados de vecinos.
Si bien, tengo la fortuna de vivir en una casa de barrio, con su pequeño jardín, eso no quita que Uma de vez en cuando le dé por ladrar.
Lo que tengo claro es que los perros tienen que ladrar, pero una cosa es ladrar por cosas puntuales y otra cosa es ladrar de forma cansina.
En este sentido, con Uma no tuvimos problemas cuando fue muy cachorra, pero de vez en cuando venía el perro de mi hermana que es muy muy ladrador (le ladra a todo lo que oye y hasta a los pájaros que ve) y despertó a la bestia.
Si antes apenas ladraba exceptuando cuando lo hacía jugando, después ladraba por varias razones ,y una de ellas, a los perros de en frente.
Si estaba en casa y escuchaba la puerta del vecino de en frente, a ladrar, si estaba fuera y escuchaba a los perros, a ladrar, si veía a alguien por la calle pasar, a ladrar (antes solo los veía pasar, no decía nada y movía la cola con mucho entusiasmo, ahora también pero siempre acompañándolo de ladridos).
El caso es que no podíamos permitir esto, porque el problema se iba agravando.
Salíamos a tomar algo en alguna terraza y le ladraba a todos los perros que pasaba.
Y la solución la arreglamos reeducándola de nuevo a ladrar lo justo.
Cómo enseñar a un perro a ladrar lo justo
Le dejamos ladrar en ocasiones en que el ladrido está justificado, además de que no es sano no dejar ladrar nunca al perro.
Pero, en aquellas ocasiones en las que el ladrido se debe a otras cosas, queríamos asociar el ladrido injustificado con algo desagradable.
Algunos adoptantes utilizan una pistola de agua pero en el caso de Uma nos bastó con una bolsa de plástico. No hay nada que le guste menos que el ruido de una bolsa de plástico.
Así pues, durante unos días tuve una bolsa de plástico en la entrada de casa, en la mesa donde paso más horas y en el bolso.
Gracias al uso del ruido de la bolsa de plástico, Uma ha aprendido a no ladrar cuando no toca, es más, es tan graciosa, que cuando intenta ladrar y yo le digo: ¿Saco la bolsa? Viene hacia mí, pone sus patas sobre mis piernas y mueve el rabo.
Entonces, la felicito y le doy una chuche porque finalmente consigue no ladrar.
Y es que lista es para todo. Para cuando quiere hacer travesuras, que las hace y gordas, y para aprender rápido.
Así que, si os encontráis con que vuestro perro tiende mucho a ladrar, probad de utilizar un estímulo desagradable a la vez que ladra y veréis grandes resultados.
Ahora podemos salir de terrazas y de nuevo saluda a los perros moviendo la cola sin decir ni mú, escucha la puerta de enfrente y a los perros y ni se inmuta, pasa la gente delante de casa y depende de quién sea ladra o no (ahí yo le dejo que el instinto de guardia está bien conservarlo), etc .
¡Nos la comemos!
La gran mayoría de perros utilizan los collares más comunes que son los que rodean su cuello. Aún siendo de nylon, cuero o metal, si el perro no controla aún el paseo, es decir, que pasea a base de tirones y empujones, y ahogándose cada dos por tres, el daño en cuello, cervicales y columna es enorme.
EL MEJOR COLLAR PARA PERRO
Por eso, desde un principio estudiamos muy bien qué tipo de collar utilizar con Uma. Si bien desde el primer día que entró a casa le puse el collar de nylon que rodea el cuello para que se acostumbrara desde bien pequeña a llevar accesorios, el collar de paseo era otra historia. Lo que sí teníamos claro es que no queríamos dañar a Uma.
De todos los collares que encontramos en el mercado, nos quedamos con el Halti. El Halti se diferencia de otros collares porque no daña ninguna parte del cuerpo del perro y evita que dé tirones.
Se trata de un arnés muy fino que sujeta el pecho y torso del perro, de forma que ante cualquier tirón evita ahogamientos o asfixias, lesiones en el cuello o espalda y es muy cómodo para el animal. Además, ayuda al propietario a evitar tirones porque la correa se ata en una argolla que se encuentra en el pecho, de forma que si el perro quiere tirar, la fuerza le empuja hacia atrás en vez de hacia adelante, y acaba por aceptar que tiene que caminar junto al dueño.
En el caso de Uma, desde bien pequeña hemos intentado educarla para pasear a nuestro lado, de forma que ante cualquier tirón seguidamente nos parábamos en seco mientras hacíamos SHHH. Ahora que está en plena pubertad, y que está más rebelde, notamos que intenta de nuevo tirar y está más activa en la correa, sin embargo, estamos tranquilos de que es una época que va a pasar rápido y en la que tenemos que tener un poco más de paciencia con la adolescente peluda.
Deciros que el collar antitirones, no lo encontré en las tiendas de mascotas de mi ciudad. Lo tuve que comprar por Internet, la verdad es que no es fácil encontrarlo. Yo lo encontré en alguna que otra tienda, así que os enlazo la dirección por si os interesa adquirirlo. Es importante que os fijéis en la talla, pues a cada tamaño de perro (pequeño, mediano o grande) le corresponde una talla concreta (S-M-L). Si os interesa ver el collar lo podéis ver aquí: Collar Halti / Collar Easy Walk.
¡Lametones de Uma!
Hoy hemos ido al veterinario porque le tocaba revisión, la pastilla para los gusanos y la pastilla para los parásitos externos, y lo que creía yo que era una dermatitis por pulgas (porque se rascaba pero aún buscando no le vi ni una), resultó no ser una dermatitis por pulgas…
No es porque Uma sea nuestra y la veamos como la perra más bonita del mundo, pero es que nos mira con esos ojos y es que nos derrite… ¿O no te pasa a ti tras mirar este vídeo?
El cuidado de los dientes del perro es uno de los aspectos más olvidados.
Casi ningún propietario se para a, al menos una vez a la semana, mirar la dentadura de su perro y es francamente importante, ya que se pueden prevenir problemas como mal aliento, la formación de sarro, problemas bucales, etc.
Cuando Uma empezó a perder los dientes de leche, cada día revisábamos la boca para ver que todo andaba bien y que ningún diente salía fuera de su lugar.
En este aspecto tuvimos suerte, porque todo funcionó a las mil maravillas, además, Uma no ha sido el típico perro que se tragaba los dientes, por lo que he podido guardar prácticamente todo tipo de dientes, muelas y colmillos.
En una cajita los tengo. 🙂
El cuidado de los dientes del perro
Para evitar la formación de sarro, lo mejor es mascar huesos.
Evidentemente, los huesos animales son peligrosos porque se pueden astillar y provocar heridas en la boca e incluso perforaciones en esófago y sistema digestivo (ya me pasó con otro perro que tuve y me juré que ningún otro perro que tuviera volvería a comer huesos), es por eso que, desde bien pequeña, le he ido comprando huesos de cuero.
Estos huesos son una maravilla, porque no solo ayudaron a calmar el dolor de dientes de Uma en su momento, sino que ahora le sirven para limpiar los dientes y mantenerla entretenida calmando su estado.
Por ejemplo, nos vamos a tomar algo a alguna terraza y mientras nosotros comemos un helado ella está mascando su hueso.
Estos huesos están hechos de piel deshidratada de vacuno que se prensa para que al perro le cueste más masticarlo. En casa Uma tiene repartidos por toda la casa: por el salón, por la terraza, en su cama…
Es increíble cómo el sarro puede empezar a aparecer a tan pronta edad.
Uma ya empezó a desarrollar en dos de sus muelas, ¡y eso que come huesos todo el día!
Por eso, fui a comprar otro tipo de suplementos, como el Denta Stix.
Le doy 3 por semana, para que se vaya haciendo un buen lavado de forma natural, y sí he notado mejoría aunque, de todas formas, estoy pensando en comprar un cepillo para realizarle un limpieza semanal de los dientes, evitando así que el aliento empiece a olerle mal.
¡Por ahora no le huele a nada!
Y otra cosa no, pero ella es feliz mascando lo que sea.
Si no tiene esto, ella se las ingenia para morder palos, piñas, hojas… lo que sea…
Y tu perro, ¿cómo tiene los dientes? ¿Sigues algún sistema para mantenerlos blancos?
Como ves, el cuidado de los dientes del perro es fundamental para evitar otras enfermedades.
¡Hoy Uma cumple 8 meses! ¡Cómo pasa el tiempo! A edad perruna, Uma ya no es una niña, es una adolescente alocada, alegre, muy cariñosa y a veces testaruda y muy muy inteligente, pero es la chispa de nuestras vidas. ¡Y como ha cambiado! Así que qué mejor que hacer un repaso en fotos de todos sus cumplemeses:
¡Menuda sorpresa que nos hemos llevado con Altudog!
Sobre todo Uma, que tiene ansiedad cuando nota que ya voy preparándole la comida, y es que ha sido todo un descubrimiento.
Altudog
Ya sabéis los que seguís a Uma hace tiempo, la importancia que le doy a su alimentación: específica para perros pero con ingredientes totalmente naturales.
Nada de subproductos que llevan la mayoría de comidas preparadas (¿que qué son subproductos? De todo menos chicha: pezuñas, huesos triturados, plumas, picos, casquería, etc.) ni aditivos químicos.
Ya os hablé de los piensos que le gustaban a Uma y de otras marcas de alimento deshidratado, pero me gusta alternar comidas para que Uma no se aburra, y de repente, aparece Altudog, una marca de la cuál no había oído hablar nunca pero que me ha sorprendido no solo por la cantidad de ingredientes que utiliza sino por la calidad de los mismos.
Como no puedo desgranar todos los ingredientes que lleva, sí que he hecho una foto al resumen en imágenes que contiene cada paquete para que te hagas una idea:
¿Qué te parece? Dan ganas a una de comérselo así tal cuál.
Preparación de Altudog
La preparación es la misma que cualquier alimento deshidratado.
Puedes adquirir dos tipos de paquetes: el pequeño que es el que yo tengo de 250 gramos, que equivaldría a 10 kilos de comida, mientras que el paquete de 6 kilos equivaldría a uno de 24 kilos.
Así pues, y como puedes ver en la foto, el alimento viene completamente envasado al vacío para conservar los nutrientes intactos (por eso no hace falta que le pongan conservantes ni colorantes).
Viertes la cantidad recomendada para el peso de tu peludo, se añade la mitad de agua caliente, se mezcla y se deja reposar… El resultado es abrumador: Uma devorándolo mientras se le saltan las lágrimas…
Precio de Altudog
¿El precio? No es barato, como ningún alimento deshidratado que se venda, sin embargo, no se puede comparar el precio de comida de mala calidad con esta comida, que es de calidad suprema.
Por ejemplo, un paquete de 500 gramos para Uma que pesa 7,5 kilos vale 7.80€ y tiene para 4 comidas.
Por eso, lo que hago es alternar varias comidas para que Uma no se aburra de comer siempre lo mismo, y como come dos veces al día, procuro darle por la mañana alimento seco y por la tarde alimento deshidratado, e incluso, alternando marcas para que no aborrezca el comer.
Si quieres probar Altudog, te lo recomiendo cien por cien y Uma aún más. Puedes visitar su página aquí: Comida Natural para perros Altudog.
Si le das a tu perro a probar, ¡cuéntame la experiencia!
Novedades en Altudog: snacks
Cinco años más tarde desde que escribí este artículo, Altudog sigue formando parte de nuestra dieta alimenticia, y en esto cinco años han crecido, renovando sus recetas, su diseño y presentando snacks de alta calidad.
Mirad qué maravilla el nuevo diseño.
Mucho más práctico que las bandejas envasadas al vacío. Y como veis, la variedad de sabores es espectacular.
Por ejemplo, veamos los ingredientes del pack de cerdo: 55% de carne de cerdo deshidratada, 16% de arroz integral deshidratado, 15% de verduras y frutas variadas compuestas de patata, zanahoria, tomate, espinaca, manzana y arándanos, 8% de grasa de cerdo, 2% de huevo entero con cáscara, aceite de salmón, algas marinas, cúrcuma y extracto de romero.
Tela con la calidad de los ingredientes.
Por otra parte, Altudog ha apostado por la creación de snacks que Uma devora en cuestión de minutos.
Entre los snacks que hemos probado: tráquea, nervios y tendones de wagyu.
Si quieres una apuesta segura de calidad, sabor y nutrición sana y completamente natural, sin duda, Altudog es tu mejor opción.
Uma ha recibido un nuevo regalo, esta vez, desde Purina y concretamente de su marca Friskies, muy conocida seguramente por todos los que nos leéis.
Se trata de un revolucionario, original y nuevo repelente de pulgas y garrapatas que funciona por ultrasonidos. ¿Cómo te has quedado?
Cómo librarse de pulgas y garrapatas
Es revolucionario porque no existe otra cosa igual en todo el mundo.
Se trata de un dispositivo pequeño y ligero que va colgado en el collar del perro y que lleva una pila.
Se supone que a través de ultrasonidos las pulgas y garrapatas se sienten molestas y se van.
Debo confesar que al principio Uma lo utilizaba como juguete, no paraba de intentar morderlo, de hecho se cargó un poco la protección de la pila, pero una vez que se acostumbró ya no le hecha cuentas.
Lo lleva hace más de una semana y, todos sabemos, que no hay un solo producto en el mercado que se libre de las pulgas totalmente.
Si hay alguien que conozca algo que libere al perro de pulgas definitivamente que lo diga. Claro que debemos utilizar antiparasitarios, sin embargo, cada vez estos animales están más inmunes…
Uma se tomó una pastilla oral que duraba tres meses. Hace dos desde la toma, la siguiente le toca en agosto, sin embargo, sigue de vez en cuando pillando alguna pulguilla.
Nosotros vivimos cerca del campo y nuestra casa tiene jardín, y Uma pasea por caminos que cruzan campos, se relaciona con muchos perros, juega con ellos, se tira encima, se la tiran encima, y es inevitable que las pulgas ataquen.
El caso es que por mucha pipeta, pastilla o collar, hasta que la pulga no pica no sabe si el perro está «bueno» o no para seguir chupando de él, pero ¡la picadura de pulga ya está hecha!
A mí personalmente no me gusta utilizar ni el collar antipulgas (sobre todo cuando vi un documental en la tele en la que decían que eran cancerígenos para los humanos), ni sprays, ni polvos… porque todos estos productos están muy expuestos a nosotros también a nivel tóxico, por eso, siempre intento que sean pastillas o pipetas.
Entonces, cuando desde Purina me enviaron este dispositivo llamado Elementia y que aseguraba una protección de 10 a 12 meses, lo cogí encantada por la novedad del producto, pero sobretodo porque es totalmente inofensivo para la salud humana y canina.
Me preocupaba un poco que los ultrasonidos molestaran también a Uma, ya que los perros tienen el oído muy fino.
Desde luego nosotros no escuchamos nada de ruidos y notamos que a Uma tampoco le molesta: duerme bien, descansa bien y no la observamos haciendo cosas raras.
El caso es que lleva una semana con el collar.
No sé si lleva poco tiempo pero ayer mismo le quité una pulga que tenía medio atontada en el cuello. Entonces pensé: a ver si está atontada por el collar…
Necesito más tiempo para comentaros pero sí puedo deciros que toda la vida he tenido perros y nunca me he encontrado una pulga atontada…
No me he puesto a buscar, pero seguramente si a alguien le interesa lo podrá encontrar en las tiendas de mascotas e incluso en algunos supermercados.
¡Ya me contaréis la experiencia! Yo por ahora, confío en él.
ACTUALIZACIÓN: Se dice, se comenta que se vende en los establecimientos Carrefour.
Acabo de recibir las fotos que le hicieron a Uma cuando tenía algo más de 2 meses en una sesión fotográfica que hicimos en casa y en el jardín.
Cómo ha cambiado, la verdad es que era una muñeca, y si no mira las fotos.
AVISO: estas imágenes pueden aumentar tu sensibilidad y empezar a convulsionar palabras como Oooh!!! Aaaiiiich!!!
Se me cae la baba… para qué engañaros…
Ahora que ha crecido, que ya tiene sus 7 meses me la sigo comiendo, y es que tiene una personalidad arrolladora: es radicalmente cariñosa, y al instante radicalmente traviesa, es muy inteligente pero me encanta cuando se hace la tonta, le encanta ser el centro de atención y lo consigue…
Espero poder contar con otra sesión fotográfica pronto, porque aunque muy cambiada, sigue teniendo esa mirada que derrite.
Pd. Recuerdo a quién esté interesad@ en adoptar un cachorro, que Uma tiene 4 hermanas y 3 hermanos buscando una familia que le quiera… Y no os puedo contar lo monísimos que son… Si alguien está interesad@ que me lo diga!
No hace ni un mes que pelamos a Uma y ya le ha crecido el pelo un montón, sin embargo, he estado leyendo lo poco beneficioso que es pelarle demasiado, ya que al final el sol puede causar estragos en su piel, así que tras ese primer pelado, nos plantaremos aquí.
Que si engorda, que si le cambia el carácter, que si nunca vuelve a ser la misma… ¡Pues no! Uma ni ha engordado, ni ha cambiado y no solo sigue siendo la misma sino que está un poco más loca si cabe.
Y es que el hecho de que el padre y la madre convivan juntos y ninguno esté esterilizado, cuando la naturaleza llama ahí que va el instinto. Si en la camada de Uma solo fueron cuatro y todas hembras, en esta camada han sido siete, cinco hembras y dos machos.
Ya han pasado 5 días desde la esterilización de Uma y, si bien la veterinaria nos aconsejó reposo durante 10 días, es evidente que era difícil de cumplir.
Uma no paró quieta, y eso que los dos primeros días… me llegué a sentir culpable por haberle operado tan pequeña.
El día de la esterilización
El día de la esterilización fue un día que pasamos con incertidumbre.
Si bien la veterinaria nos calmó muchísimo sobre la operación, el hecho de que le extirpen los ovarios y el útero no me parecía una operación como para tomársela a la ligera.
Sin embargo, dejé a Uma a las diez de la mañana en la clínica y en menos de una hora no solo le habían esterilizado, sino que también le operaron de la glándula lagrimal otra vez, por haberle saltado el punto porque no para quieta un segundo.
El caso es que a las dos del mediodía ya pudimos recogerla.
La pobre estaba anestesiada, sin alegría y sin ganas de nada, y con una brecha en la barriga de ocho puntos de sutura.
La veterinaria nos dio varias indicaciones para el postoperatorio de la esterilización:
- No darle de beber ese día si no tenía sed, y si tuviera ganas de beber, poco a poco, nada de hincharse beber.
- Por supuesto, nada de comer hasta el día siguiente.
- Darle al día siguiente y durante dos días, una pastilla antiinflamatoria.
- Darle a partir del día siguiente y durante 6 días antibiótico cada 12 horas.
- Administrar yodo a los puntos una vez al día.
- Limpiar la herida con agua oxigenada en caso de suciedad.
- Reposo en la medida que podamos durante 10 días: esto incluye no subir ni bajar escaleras, no correr, no ponerse de pie, no hacer movimientos bruscos, salir al tercer o cuarto día para hacer un pipí y para dentro de casa…
El postoperatorio de la esterilización
La primera noche fue horrorosa.
No dormimos ninguno, pendientes de Uma que no conseguía conciliar el sueño debido a la incomodidad de la sutura y porque los efectos de la anestesia ya estaban pasándole factura.
No se quejó en ningún momento, pero no paraba de moverse y de intentar llegar a los puntos, cosa que no podía por el collar isabelino, pero se las ingeniaba para ello intentando rascarse con las patas traseras, etc, así que teníamos que estar pendientes de regañarla de buen rollo y con cariño para que no intentara acercarse a la herida.
Pasada la primera noche, al día siguiente se levantó animada: comió de lujo, bebió de lujo y se tomó sus pastillas de lujo.
Si es que me lo pone tan fácil… Bueno, rectifico, porque para ponerle yodo en la herida… no sé de dónde saca tanta fuerza pero nos las vemos y nos las deseamos…
El día siguiente de la operación lo pasó también incómoda, caminando con pasitos cortos, suspirando y mirándonos como diciendo: pero ¿por qué me habéis hecho esto?
Y me sentí muy culpable: de verla sin alegría, con dolor, …
La cosa es que esa noche durmió del tirón desde que se acostó hasta el día siguiente, yo creo que ni cambió de postura… y volvió a ser Uma de nuevo.
Una rápida recuperación
Uma y reposo, son dos cosas que no casan.
Cuando Dios repartió calma y serenidad, Uma estaba la última de la cola, porque ese sueño reparador junto con las pastillas hizo que no parara un segundo…
Venga regañarla para que no se moviera, y cuanto más le regañabas, más corría de un lado a otro…
¿Como si tuviera un petardo en el culo? Pues igual.
Yo ya sufría por los puntos, pero se ve que la veterinaria es una profesional, porque yo no lo entiendo, pero ya han pasado 5 días y con lo que se mueve, salta, sube, baja y corre por mucho que la queramos parar, no le ha saltado milagrosamente ni un punto.
Evidentemente, al tercer día ya salimos de paseo.
Eso sí, corto, la vuelta a la manzana y lento.
Así que ahora que han pasado los 5 días tras el postoperatorio de la esterilización no me siento tan culpable, sobre todo, porque sé que Uma ha ganado en salud:
- No tendrá que pasar por la montaña rusa hormonal.
- No sufrirá de las molestias que pueda crear el celo.
- No tendrá que aislarse del mundo para evitar soportar la fila de machos detrás de la puerta acosándola para intentar cumplir con su instinto.
- No sufrirá de cáncer de mama, útero ni ovarios.
- No sufrirá de piometra, una afección muy común en las hembras no esterilizadas.
- No desarrollará embarazos psicológicos.
- Ha aumentado su esperanza de vida.
- Ha aumentado su calidad de vida.
En fin, que en el postoperatorio de la esterilización se pasan dos días mal, pero vale la pena para que el resto de su vida esté la mar de tranquila.
Tan tranquila como ahora, que está durmiendo su siesta, por cierto, en su cama de cuando era más pequeña, que tiene dos más grandes pero insiste en dormir en la de toda su vida.
Pero, ¿qué pasa si algo va mal?
Signos de alarma después de la esterilización de una perra
Después de la esterilización de una perra, es importante estar atento a cualquier signo de alarma que pueda indicar complicaciones o problemas posteriores a la cirugía.
Algunos signos de alarma que debes tener en cuenta tras el postoperatorio de la esterilización:
- Sangrado excesivo: Un poco de sangrado después de la esterilización es normal, pero si notas sangrado abundante o persistente, es importante buscar atención veterinaria de inmediato.
- Inflamación o enrojecimiento: Un poco de inflamación y enrojecimiento alrededor de la incisión es normal, pero si la zona se vuelve muy inflamada, caliente al tacto o presenta secreción de pus, podría ser indicativo de infección.
- Dolor intenso: Es normal que las perras tengan cierto grado de incomodidad después de la cirugía, pero si notas que tu perra está experimentando un dolor intenso que no disminuye con los analgésicos recetados, es importante que lo consultes con el veterinario.
- Incapacidad para comer o beber: Si tu perra muestra falta de apetito o no está bebiendo agua después de la esterilización, podría ser un signo de complicaciones. La deshidratación y la falta de nutrientes pueden ser perjudiciales para la recuperación.
- Letargo extremo o debilidad: Si tu perra parece extremadamente cansada, débil o apática después de la cirugía, y esta condición no mejora con el tiempo, es necesario buscar atención veterinaria.
- Vómitos o diarrea persistentes: Si tu perra vomita repetidamente o tiene diarrea intensa y persistente después de la cirugía, podría ser un signo de complicaciones gastrointestinales.
Si observas cualquiera de estos signos de alarma después de la esterilización de tu perra, te recomiendo que consultes inmediatamente con tu veterinario.
Es importante tener un seguimiento adecuado después de la cirugía para asegurar una recuperación exitosa.